Se
puede decir, al ver a los bailarines ejecutando los pasos de la Zamba, que es
la danza de galanteo por excelencia.
Durante la representación del baile podemos observar la pasión amorosa con la
que el hombre trata de conquistar, insistentemente pero con delicadeza a la
mujer, que se mostrará esquiva hasta el momento de la coronación.
En la
Zamba, a diferencia de las otras danzas que hemos publicado en ediciones
anteriores, se utiliza el pañuelo
que es de un gran significado ya que a través de distintos movimientos y pose
los bailarines trasmiten sus deseos y sentimientos.
Es un
ritmo que lo bailan parejas sueltas
(los bailarines nunca se tocan) e independientes (las distintas parejas no se
relacionan entre sí) y, a diferencia del gato y la chacarera, los movimientos son pausados.
Es
descendiente, al igual que otros ritmos, de la zamacueca (al parecer de ella se
originan los nombres de la cueca y la zamba). Este ritmo proviene del fandango
(antiguo baile) español que se asienta en Lima, Perú en el siglo XVIII.
Desde
este país llega a Chile entre 1824 y
1825 entrando a nuestro país por Mendoza.
También llegó a la Argentina por el norte desde Bolivia, bailándose en casi todas las provincias donde se da lugar
a la formación de sus danzas descendientes entre las que se encuentran la Zamba, la Chilena, la Cuequita y
la Cueca.
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